Blogia
EL REY DEL RETIRO

¿La Revista Atalaya? ¿Y en mi casa? Suban Suban... (Sketch del vendedor de bromas)

¿La Revista Atalaya? ¿Y en mi casa? Suban Suban... (Sketch del vendedor de bromas) Leeros siempre me hace recordar cosas que voy anotando en un post-it cargado de letras (¿que pensara la secretaria cuando ordena esta mesa-leonera?). Tengo grabada la historia de los vendedores de la revista Atalaya, que a mi también me hicieron una visita.

Un sabado morning, o no tanto, a eso de la una suena el timbre que me despierta... gayumbos, camiseta (nunca supe que es un pijama), legañas, el pelo revuelto y demás indumentaria propia del momento.
- Güenos dias (nótese la congestión nasal).
Dos chavales recios en la puerta, pelo militar, impecable traje negro, camisa blanca y una identificación que el coctel de legañas, miopia y resaca me impedian ver.
- Muy buenos dias señor, le inoportunamos?
- Mmmm (Lo entendí como pregunta retórica)
- ¿Conoce usted la Bilbia?... seguido de la clásica miniparrafada del tipo cuando te mueras vendrán unos querubines alados a llevarse tu alma y esparcirán flores formando un aura eterna.
- No demasiado (a secas, fruto de mi exceso de diplomacia y buen humor al despertar).
- Pues le dejamos este folleto (La revista Atalaya!!) y nos pasamos otro día y charlamos sobre ello. ¿Nos dice su nombre por favor?
- Como no, me llamo Hugo

Siguiente sabado morning, idem, la misma situación, el mismo timbre, quiero suponer que con otros calzoncillos y otra camiseta distinta, legañas nuevas, y seguro el mismo pelo.

- Güenos dias.
- Buenos dias señor, queriamos hablar con Hugo.
- Ay, pues se acaba de marchar..
- Pues nada volveremos en otro momento.

(Pregunta: Si no me recordaban en el plazo de una semana, ¿me tengo que creer que se acordarán de enviarme a los querubines alados cuando me muera?)

0 comentarios