El peliculon
Menos mal que nos vamos conociendo un poquito niño, me digo en mi primer día de uniforme, y ya vamos aprendiendo que ante las inesperadas visitas del SR. AGOBIO, y aunque tenga que abrirle la puerta y ofrecerle un café (porque no se hacerlo de otro modo), basta con darle la razón (si, si, si.. como usted dice) para más tarde intentar de dormir y así alejar su verborrea. Si la visita se reproduce al despertar, toca relajarse, tratar de pegar una patada a los dramatismos e intentar afrontar hablando con quien corresponda los motivos del agobio. (Que bonito suena...).Al final hubo mucho de pelicula en mi cabeza agobiada, malamente guiada por el silencio con ella y consideraciones de terceros que, ahora se, tenian mucho de suposiciones y poco de ciertas. Por suerte, la pelicula se esfumó tan pronto crucé el umbral de la puerta y empezamos a charlar. Y es que cuando uno se agobia, subestima a la persona con quien se agobia, retuerce sus posibles pensamientos y la oscurece. Ahora, y a diferencia del momento del agobio en que uno pinta de negro casi todo, quedan los buenos recuerdos.
Por cierto, y hablando de peliculas, permitanme una recomendación que anoche me dejo flotando por las nubes: HIERRO 3 de KIM KI-DUK (en version original subtitulada, que aunque esté en koreano, no es que hablen mucho precisamente, jwjw)
3 comentarios
G. -
Me apunto la peli, que me quedé con muchas ganas de verla en el cine. Un besazo pa todo el fin de semana.
Tharsis -
Ana -
Va un beso.